Campeonato de España - Faltan 2 dias

Esta mañana ha empezado mi aventura hacia el campeonato de España de embarcación fondeada. A las 6h20 he cogido un vuelo, en el aeropuerto de Reus, con dirección a Nador (un pueblo marroquí situado a unos 40km de Melilla).
Cuando vas en avión y ves que alguno de los pasajeros es Arabe inevitablemente se le cuelga la etiqueta de terrorista. Pues bien, cuando en un vuelo de 200 personas donde los únicos a quien no se le atribuye esa etiqueta es a la tripulación y a ti, os aseguro que se pasa mal. Por suerte el vuelo ha transcurrido sin ninguna incidéncia y hemos aterrizado en Nador 20 minutos antes de lo previsto gracias al viento de cola.
Una vez en tierra firme he cogido un taxi (si se le puede llamar así) con dirección a Melilla. Los taxis en Nador suelen ser Mercedes antiquísimos y hechos polvo. Ah si!!! y sin cinturon de seguridad, elemento que no les vendria nada mal ya que las señales, semaforos y lineas de la carretera no son mas que adornos urbanos ignoradors por todo conductor. El trayecto del aeropuerto a la frontera es bastante corto (35 min. aprox.) y en él uno se da cuenta de la pobreza del lugar.
Una vez en la frontera vemos una cola expectacular para cruzarlar.

El taxista se niega a pasarme a Melilla ya que prevee 4 horas de cola y me aconseja que cruce a pie. Así lo he hecho, cargado con todo el equipaje y esquivando a marroquís que ofrecian su ayuda para llevar las maletas a cambio de una propina (anda que iva ha dejar mis cañas en manos de uno de esos ...) he cruzado la frontera.
En territorio español el corazón vuelve a su ritmo normal y la tranquilidad te invade porfin. Solemos quejarnos con constancia pero realmente no sabemos lo afortunados que somos. Es curioso ver como una valla separa el territorio español del marroquí y con ella la distinció entre pobreza y riqueza.
En territorio melillense he cogido otro taxi, esta vez con dirección al hotel. Este es bastante cutrillo por fuera pero por dentro no está mal. Al llegar a la habitación siesta obligatoria después del madrugon y de la tensión acumulada. Al despertar he ido a visitar la ciudad. Si no lo hubiera hecho tampoco pasaba nada ya que no hay nada destacable en ella. Solo me ha impactado ver como a dia de hoy todavia hay esculturas en memoria de Franco.

Lo que si que me he percatado es que Melilla es un reflejo de la España del futuro donde hay mas moros por metro cuadrado que en la zona de frutas del mercado de Bonavista. Lo que es curioso es que por aqui no hay ningun bazar chino.
Al parecer aqui es costumbre llevar lentillas, lo que pasa es que a ciertas horas se les caen y entonces se ponen a buscarlas.

Dejando el humor a un lado, me esperan unos dias de aburrimiento hasta que no llegue el campeonato. Suerte que mañana por la tarde tengo una salida de pesca para entrenar y probar la zona.